Una vez más, Mercedes nos miente a la cara

¡¡¡Alerta Spoilers!!! 

¿Recordáis aquellos tiempos en que las palabras tenían significado? Bueno, parece que Mercedes no. Con su último acto de «generosidad«, nos ha entregado la cesta ecológica de Accenture. Ecológica, sí, porque su vacío es tan resonante que hace eco. ¿No es maravilloso recibir una cesta que celebra la nada? 

La cesta O-Blanca, bautizada así no por sus productos de marca blanca (que ya sería demasiado pedir), sino por el blanco de las promesas de Mercedes Oblanca. ¿Recuerdan aquella promesa de un móvil para cada empleado en 2019? Claro que sí, ¿cómo olvidar tal gesto de generosidad? Tan real como las sirenas y tan tangible como el aire. 

Y hablemos de esa promesa en el minuto 42:22 de «Conectados con Mercedes«, donde aseguraba una «buena cesta» para esta Navidad. Bueno, ¿quién necesita calidad o cantidad cuando puedes tener un eco? Enlace al video 

Para los empleados, el descenso de más de 200€ a unos miserables 60-70€ por cesta es una clara mejora, ¿verdad? A fin de cuentas, ¿quién no prefiere una reducción en el valor? Especialmente cuando la cesta jamonera más barata del Corte Inglés, que oscila entre 66-75€, parece un tesoro comparada con la nuestra. 

Pero desde la perspectiva de Mercedes, esto debe ser una victoria. Si Accenture España tiene más de 15800 empleados y se ha ahorrado más de 125€ por cesta, estamos hablando de un ahorro de 2 millones de euros. ¿Acaso no es eso una buena cesta para los accionistas y la junta directiva? Aplausos para Mercedes por asegurarse de que, mientras los empleados reciben menos, la banca (y Mercedes, por supuesto) siempre gana.